25 de febrero de 2012

El Diseñador Gráfico de la mano con el Grafólogo

 


Hace más de cinco años que investigo sobre la relación entre la Grafología y el Diseño Gráfico, no sólo me apasiona, sino que además encuentro en el diseño mucha relación con la Grafología.

Por eso me resulta muy interesante compartir algunas cosas con las que el Diseño Gráfico debe lidiar día a día, al igual que la Grafología, como lo es el prejuicio, la falta de conocimiento sobre la profesión, como por ejemplo: que aún se sigue diciendo que es una pseudociencia [1]. Intento ponerme en los zapatos de los diseñadores para poder comprender su profesión y así, poder asesorarlos y ayudarlos desde mi especialidad.

Ver Artículo relacionado: “La tarea del Grafólogo en la Grafología Publicitaria”

[1] El término pseudociencia o seudociencia es un neologismo formado a partir de la raíz griega pseudo, «falso», y la palabra latina ciencia, «conocimiento». http://es.wikipedia.org/wiki/Pseudociencia   



Este artículo surgió hace poco tiempo, cuando me preguntaba:


Cuál es la mayor dificultad que encuentra un Diseñador Gráfico a la hora de realizar el diseño o rediseño de un logo?


A qué o quiénes recurre cuando tiene una dificultad, a qué disciplina o fuente consulta, que no sean otros diseñadores?

En fin, aquí les comentaré algunas de las cosas que fui observando hasta el momento.

Indagando a los profesionales del Diseño Gráfico, leyendo en Foros, Blogs, etc. pude observar que muchas de las dificultades que encuentran al realizar sus trabajos, están relacionadas a que:

El cliente ve su trabajo como un simple dibujito, que puede ser realizado de una forma sencilla con la ayuda de la tecnología; entonces cuando el diseñador intenta cobrar su trabajo se enfrenta a un sinfín de cuestionarios, porque muchas veces los clientes no creen que lo que el diseñador están haciendo es ayudarlos a comunicar y vender la imagen de su empresa, o peor aún algunos deben prácticamente regalar sus servicios y esto no les da una buena imagen.

Lograr sacar una idea en claro, después de que el cliente le explique cuáles son sus objetivos, metas, gustos, etc. (Brief), para eso necesita un tiempo, pero deben trabajar contra reloj, lo que implica que su trabajo pierda el valor que le corresponde. Entonces deben lidiar con el cliente y hacer malabares para sacar una idea, original, estética, funcional, etc.

Explicarle al cliente que lo mejor sería utilizar determinada tipografía, o determinado color, etc. es a veces un doble trabajo, puesto que a veces el cliente viene con una idea fija y cuesta hacerle entender lo contrario.

Hay muchas razones por las que pueden ocurrir estas cosas:

1-   El diseño no es valorado y no se conoce la verdadera utilidad del mismo. Puede ser por una mala o equivocada información. Depende de cada profesional luchar contra ese virus.

2-   Puede ser que el diseñador no sepa explicarle al cliente cómo funciona verdaderamente su trabajo, en qué consiste y esto es muy importante para que respeten sus tiempos de creación, investigación, etc.

El cliente debe conocer las etapas de la creación de un logo o rediseño. Es fundamental para un buen comienzo del trabajo, para que al fin se pueda lograr que el cliente acepte las propuestas y los costos, porque así estará dispuesto de otra manera, estará abierto a lo que el diseñador le proponga.

Por otro lado el diseñador también debe estar abierto y con sus cinco sentidos preparados. Crear empatía con el cliente es el primer escalón al éxito del trabajo.

3-  El mismo profesional no sabe cómo hacer para que valoren sus trabajos, porque lamentablemente se enseña muy poco o nada al respecto. Esto pasa también en muchas profesiones, pero aquí nos ocupa el Diseño Gráfico.

4-   Tal vez les esté faltando una herramienta que justifique formalmente sus trabajos que tengan un razonamiento lógico, un por qué desde lo racional, más allá que el diseño sea estético, atrayente, funcional, etc.

5-   Hay una escases en la preocupación por comunicar eficientemente y ampliar las miras, incluyendo otras disciplinas que le den un valor agregado, como lo son: la caligrafía, la psicología, la semiótica, etc., y actualmente la grafología. Cuantos más conocimientos se sumen, mejor será el resultado del trabajo.

6-  Observé que muchos diseñadores consultan sobre sus trabajos a otros colegas y por lo general obtienen críticas que no les aporta muchas ideas de cómo podrían mejorar su trabajo o en qué pueden estar fallando.

Es enriquecedor que otros aporten sus opiniones, pero además de ello deberían buscar algo que refuerce sus trabajos y no que sólo los califiquen por bueno, malo, lindo, feo, etc.

7-   Por otro lado, es más fácil diseñar para el cliente que para uno mismo. Qué pasa con la Imagen Corporativa de tu empresa? Cuánta importancia le estas dando?

Por mi parte, me di cuenta que lo más difícil era asesorarme a mí misma por eso recurrí a profesionales para que me guíen y desde mis conocimientos trabajamos en conjunto. Nadie puede solo, necesitamos del otro, por eso mi trabajo consiste en trabajar de forma interdisciplinaria.


Es muy negativo para el profesional de la comunicación visual, llegar al cliente de una forma combativa, me refiero a que si cada vez que un diseñador tiene un nuevo cliente en vez de verlo como una oportunidad, lo ve como una nueva amenaza, será una lucha a duelo de ver quién gana más, y al fin el cliente termina teniendo la razón, quedando el diseñador frustrado porque no pudo convencer al cliente de hacer tal o cual diseño, además aceptando que le pague lo que no vale su trabajo y negado a que luego se divulgue que ese diseño fue obra suya, por temor a que lo condenen y quemen en la hoguera.

Sería muy bueno que esto no siga pasando, verdad?  Poder lograr que el cliente sea un socio con el que se pueda debatir y opinar y a la vez asesorarlo para que logre su objetivo, entonces todo fluiría mejor. El trabajo del diseñador se valorizaría aún más, el mismo se sentiría a gusto haciendo su trabajo, y el cliente se iría feliz con una solución adecuada para su marca, que cumpla con todos los requisitos y objetivos de comunicación.


¿Qué es la Grafología Publicitaria?

Principalmente debemos saber que la Grafología es la ciencia que estudia la estructura y los procesos dinámicos de la escritura manuscrita y de las producciones gráficas en general (espacio, forma y movimiento).

La Grafología Publicitaria intenta unir sus conocimientos con otras disciplinas del campo de la comunicación visual como lo son: el Diseño Gráfico y Tipográfico, la Publicidad, la Comunicación y el Marketing. Intenta aportar una nueva visión en la creación de logotipos, Isotipos, tipografías, publicidades gráficas, entre otros.

Para ello es indispensable que el grafólogo tenga conocimientos sobre las disciplinas anteriormente nombradas. Para así poder aportar las herramientas necesarias a los profesionales con los que deberá trabajar de forma conjunta, ya que deberá contar con el apoyo de los diseñadores gráficos principalmente para poder desarrollar su trabajo.

La Grafología Publicitaria, vendría a ser una herramienta con la cual dichos profesionales podrán contar para ser asesorados, guiados y concientizados desde una visión Grafo-Psicológica, sobre los posibles cambios que se pueden realizar en un logotipo, la elección más adecuada para una tipografía, saber qué comunica un logotipo, tipografía, etc.

Poder lograr un trabajo interdisciplinario entre la Grafología Publicitaria y el Diseño Gráfico, sería una muy buena forma de combatir algunas de las dificultades que encuentra hoy el Diseñador Gráfico o por lo menos las que fueron nombradas en este artículo.